Tradiciones a la venta
La Navidad tampoco se escapa de las garras de las redes sociales: si bien prometen conectar a las personas y compartir el espíritu festivo, también han alimentado un consumismo desenfrenado e insostenible. Lo que alguna vez fue un tiempo de reflexión y unión se transforma, muchas veces, en un espectáculo de superficialidad y despilfarro. Durante la temporada navideña, redes como Instagram, TikTok y Facebook se inundan de campañas publicitarias disfrazadas de contenido orgánico: infinidad de influencers y marcas aprovechan para promocionar productos de todo tipo, normalizando un estilo de vida que no todos pueden alcanzar y que a largo plazo es insostenible. Esto no solo fomenta el endeudamiento, sino que también contribuye al estrés financiero, que contradice el mensaje de paz y alegría que debería caracterizar la Navidad. ...